viernes, 4 de mayo de 2012

Emeli Sandé.




Hola a tod@s.
Después de unos días de ajetreo no podía encontrar la mejor forma de volver a la rutina y coger un pelín de fuerzas para llegar al fin de semana. MUSIC POST, esa es la fórmula que mejor me funciona, sumergirme de nuevo por la red para sacar a la luz esa canción que te sube el ánimo o que simplemete te llena por lo que te trasmite. Y hoy esa responsabilidad se la traspaso a Emeli Sandé, una voz que está revolucionando la música, tanto que hasta le ha arrebatado los galardones a la propia Adele. Algo tendrán en común Adele y esta británica de oígenes africanos y, a parte del nombre, pues también se llama Adele, ya que entre las dos se reparten los British Choice Critics Adwards, aunque la nueva, que ya no se llama Adele para que no hayan confusiones, se ha alzado con los mejores reconocimientos en la última edición.







Y no me extraña porque los temas de su disco son de esos que escuchas una vez y sabes con certeza que van a dar que hablar. Pero yo me pregunto: ¿Por qué Emeli Sandé se ha decidico ahora a publicar su propio disco? ¿Qué por qué me lo pregunto? Pues porque Emeli lleva años y años dedicándose a la música, pero desde bastidores, sin mostrar su rostro, solo sus letras, y nada menos que las letras de las canciones de Leona Lewis, Susan Boyle, Cheryl Cole o la misma Alicia Keys. Pero es que chica ha roto moldes porque, vale, puedes ser un as escribiendo letras pero ¿y la voz? la voz no la sacas de un cajón, escribes y si no te gusta la borras. O la tienes o mejor olvídate porque con los portentos de voz que están en el mercado, hablemos de la misma Adele, no es fácil. Todos sabemos lo dura que es la industría musical, y lo frívola, porque no me explico que a alguien le diera por crear el producto, tipo bollicao de fábrica, Lana del Rey, que sí, que sus canciones arrasan, algunas de ellas está en la recámara de mi móvil, pero comprar un disco ya es otro cantar, nunca mejor dicho. Escucha esto y dime que no es soberbio.







Y es que esta estudiante de medicina con beca en Madrid, que supongo tendrá en un congelador criogénico esperando culminar su otra carrera, no podría ser más secilla. Y modesta, porque hasta que no ha visto el éxito de sus canciones en voces ajenas parece no haberse dado cuenta de que lo suyo es y ha sido siempre la música. Ahora se lleva mucho eso de Número Uno y no sé qué más concursos tipo OT, pero de calitè, porque lo otro era ir dando palos de ciego o mejor dicho, soltando gallos al alba, pero lo de esta chica son palabras mayores. Pero dejémonos de monsergas y vayamos a otro de los éxitos de Emeli, HEAVEN, una agitada sintonía que enamora los oídos y reaviva el espíritu. Y lo mejor: nada que envidiar a Adele, que ya me gustaría a mi saber la opinión que tienen la una de la otra. Eso, cuiriosidades varias que me vienen a la mente.





Disfrutad, de Emeli Sandé y del fin de semana. Chao!!


No hay comentarios:

Publicar un comentario